Garantiza la calidad de tu sueño con un colchón que se ajuste a tus necesidades: firmeza, peso y altura. Pero ¡ojo! Hay muchos otros factores que debes tener en cuenta: cómo la temperatura ideal para dormir. Dormir a temperaturas altas e inadecuadas puede ser perjudicial para tu salud. Este verano duerme a gusto, di adiós a las siestas y noches calurosas.
Descubre cuál es tu temperatura ideal
Si piensas en cuál es la temperatura ideal para dormir, ¿Qué tienes en cuenta? ¿Piensas solo en la temperatura exterior? No caigas en ese error. La realidad es que hay más factores que afectan a la temperatura ideal para dormir, entre ellos, la temperatura corporal. Según la ASEPP, Asociación Española de Psiquiatría Privada, son 21 grados los que se necesita para dormir adecuadamente. Dormir por encima o debajo de estos grados supone perder calidad del sueño.
“Con el aumento de la temperatura ambiente, se produce una hiperactivación del metabolismo motivada por el esfuerzo corporal de mantener la temperatura interior acorde con la exterior, lo que tiene consecuencias cerebrales”, asegura el doctor José Antonio López Rodríguez, vicepresidente de la Asociación Española de Psiquiatría Privada (ASEPP). “Al estar más activo, aparecen síntomas como irritación, nerviosismo y los temidos trastornos del sueño.”
Encontrar el equilibrio en la temperatura ideal y correcta para dormir será clave para un descanso pleno, reparador y de calidad. Los especialistas recuerdan “dormir por encima de los 26 grados activa el mecanismo de refrigeración del cuerpo y por debajo de los 12 grados el cuerpo se activa para calentarse. En ambos casos se acaba produciendo una interrupción del sueño.”
Invierte en descanso y obtén tu temperatura ideal
Invertir en un colchón de calidad es invertir en tu salud. Centrándonos en la calidad del colchón con el fin de obtener la temperatura ideal debemos tener en cuenta que hay materiales que dan más calor que otros. Esto, afecta directamente al hecho. Es decir, cuando una persona se hunde en el colchón, la cantidad de aire que circula y corre a su alrededor es inferior y esto, provoca un aumento del calor.
También debemos tener en cuenta que si la temperatura de la habitación es alta, disminuirá la calidad de tu sueño mientras que si la temperatura de la habitación es baja, también bajará la temperatura de tu cuerpo. ¡Escoge el colchón siempre acorde a tus necesidades!
Recuerda, ventila varias veces al día la habitación para que el aire viciado sea reemplazado por aire nuevo. De esta manera mantendrás la habitación con suficiente oxígeno para toda la noche. También es importante que ventiles tu cama para ayudar a mantener la temperatura y un ambiente cómodo a la hora de dormir.
En cualquier caso, los científicos especializados en esta materia han establecido lo siguientes parámetros en cuánto a la temperatura ideal para dormir según el rango de edad al que pertenecemos:
– La temperatura ideal en adultos para conciliar el sueño está entre los 15 y los 22 grados centígrados.
– En las personas mayores en cambio, oscila entre los 19 y los 21 grados centígrados.
– Los bebés así como los niños y niñas más pequeños está entre los 18 y los 21 grados centígrados.
Debes tener en cuenta que la temperatura adecuada para tu descanso va a variar en función de la época del año. No será la misma en invierno que en verano y en primavera. Por ello, en nuestro blog encontrarás trucos para dormir fresco con la llegada del calor.
Beneficios de dormir con la temperatura adecuada
Mejora del sistema inmunitario: nuestro sistema aprovecha las horas de sueño para regenerarse. Así pues, un descanso de calidad siempre y cuando esté acompañado de hábitos saludables, te proporcionará un buen estado de salud ya que facilita la eliminación toxinas y gérmenes.
Mejora el rendimiento de la memoria: Así es, mientras duermes – en la Fase REM del sueño -, el hipocampo se renueva. Dormir y descansar bien altera la memoria y fortalece sus conexiones neuronales ayudando a fijar y almacenar los que entendemos como recuerdos.
Disminuyen los problemas de peso: Descansar mal, dormir poco, sufrir insomnio… influye y está directamente asociado con la obesidad. La escasez de leptina, la hormona supresora del apetito, viene dada por los adipocitos como consecuencia de la falta de sueño mientras que la grelina, la hormona supresora del apetito, es la que provoca al estómago liberarla. ¿Cuál es la consecuencia de esto? Que aquellas personas que no tengan un control sobre la calidad de su sueño y duerman mal, coman más ya que liberan hormonas que aumentan el apetito.
Disminuye los problemas relacionados con el corazón: Los constantes problemas con el sueño aumenta el nivel de adrenalina aumentando en consecuencia la frecuencia cardiaca, el estrés y la presión arterial. ¡Cuida y protege a tu corazón con un buen colchón!
En NIX Descanso tienes a tu alcance el mejor equipo de descanso para que duermas bien y descanses mejor. Cada uno de los productos de NIX Descanso combina confort, diseño, calidad y durabilidad con el fin de proporcionarte la mejor experiencia en tu descanso.
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